Día 3: Parque Nacional Volcán Tenorio

Nos despertamos temprano en un lugar idílico y después de desayunar, pusimos rumbo al Parque Nacional Volcán Tenorio. De camino, vimos ¡un tapir! Fue todo muy rápido. Íbamos con el coche por un camino de tierra cuando, de golpe, vimos algo que salía de la vegetación. Estábamos súper emocionados. El pobre tapir estaba súper asustado, así que decidimos parar el coche y esperar a que se fuera. Era uno de los animales que más ganas teníamos de conocer.

Parque Nacional Volcán Tenorio

Horario: 8-14h

Entrada: 12$

Parking: 2000 colones

La entrada la compramos en las taquillas que hay allí. El parking se le paga, en efectivo, a la persona que lo está vigilando. Un sendero llamado misterios del tenorio te lleva a conocer los principales atractivos del parque. Tiene una distancia de unos 3,2 km. A lo largo del recorrido visitas:

• Catarata Río Celeste

• Los hervideros o borbollones

• El teñidero

Durante el recorrido te puedes encontrar con diferentes animales, pero al ser un lugar muy turístico, no suele ser lo normal. Os recomendamos ir a primera hora, ya que cuando íbamos a salir, decidimos volver a la Catarata del Río Celeste para volver a hacer alguna foto ¡y nos fue imposible bajar de la gente que había!

De camino a nuestro siguiente destino, nos desviamos un poquito para comer en un lugar que teníamos muchas ganas de conocer: La ventanita Café. El lugar tiene unas vistas del volcán arenal… ¡increíbles! Pero si crees que las vistas son lo mejor… ¡espera a probar su comida! El burrito vegetariano estaba ¡delicioso!

Vistas desde la Ventanita Café

El restaurante está ubicado en una casa, así que no os preocupéis si al llegar allí no veis un restaurante “como tal”. A nosotros, nos costó descifrar que se trataba de aquel lugar. Pero google maps ¡no falla! Bueno, quizás sí, pero no en ese caso.

Con las pilas cargadas, pusimos rumbo al que sería nuestro alojamiento de aquella noche: Arenal Observatory Lodge. ¿Os resumo nuestra estancia en él? Solo os digo, que si hubiéramos podido, nos hubiéramos quedado más noches. Pese a no ser un hotel barato, el precio es inmejorable para lo que ofrece. Es un alojamiento donde lo tienes ¡TODO! Y ahora sabréis por qué.

Durante el check-in nos explicaron la multitud de actividades que teníamos disponibles en el alojamiento: senderismo, puentes colgantes, un ranario, tours naturalistas diurnos y nocturnos, masajes, jacuzzi, piscina… y podría seguir. Decidimos apuntarnos al tour naturalista diurno para la mañana siguiente, ¡es gratuito! Obviamente, hay actividades de pago y otras no.

Después de hacer el check-in, dejamos las cosas en la habitación y ¡nos fuimos a explorar! Queríamos hacer una ruta, dentro del alojamiento, que te lleva a conocer una catarata: la catarata Danta. La ruta nos llevó algo menos de una hora, pasamos por puentes colgantes, cruzamos unos senderos preciosos en medio del bosque y bajamos unas escaleras empinadas que nos llevaron hasta la catarata Danta. ¡Una pasada!

A la vuelta, como no podía ser de otra manera, ¡se puso a llover! ¡Acabamos empapados! Así que, decidimos coger el bañador y disfrutar de la lluvia desde el jacuzzi. El jacuzzi, se encuentra al lado de la piscina, en un espacio tapado. Además, tienes unas vistas espectaculares del volcán Arenal. Fue una tarde ¡increíble!

Cuando la lluvia paró, fuimos a recorrer otros senderos del hotel. Visitamos el ranario, subimos a la torre de observación, nos dimos una vuelta por el museo y acabamos el día viendo un atardecer espectacular desde la terraza del restaurante.

En nuestra opinión, el único aspecto que podrían mejorar es el servicio de cena. Al ser un alojamiento tan grande, normalmente, sus huéspedes se quedan a cenar en sus instalaciones. Para ello, debes reservar con antelación. Cuando fuimos a hacer la reserva tenían una carta que estuvimos mirando y nos pareció correcta. Los precios eran más elevados que en otros sitios, pero había opciones que nos gustaban. Cuando fuimos a cenar, la carta era diferente. Bastante más corta y sin mucha variedad. Para gente vegetariana ¡muy pocas opciones!

Por el contrario, el desayuno nos pareció ¡espectacular! Una noche en habitación doble con desayuno incluido nos costó 150€.