ROADTRIP POR EL PAÍS VASCO
- amigasenruta
- 23 may 2020
- 7 Min. de lectura
Actualizado: 22 ene 2023

Recorrer el País Vasco era un plan que nos apetecía desde hacía mucho tiempo. Sentíamos curiosidad por conocer sus playas, sus famosos acantilados, sus pueblos pintorescos y su deliciosa gastronomía. Queríamos disfrutar, desconectar y dejarnos llevar por sus tierras.
Se acercaba semana santa y nuestras ganas de empezar una nueva aventura iban en aumento. Solo disponíamos de cuatro días y un coche, pero teníamos claro el destino, ¡el País Vasco nos esperaba! Nuestra ruta por tierras vascas se centró en conocer, principalmente, Vizcaya y Guipúzcoa.
Tuvimos la suerte de contar con unos días en los que hizo muy buen tiempo, pudimos disfrutar de su gastronomía y visitar los sitios más emblemáticos de Euskadi.
RUTA DE 4 DÍAS POR EL PAÍS VASCO:
Día 1: Llegada a Bilbao, visita del famoso puente de Vizcaya y noche en Urduliz. Día 2: Bermeo - Guernika - Zumaya - Zarautz. Noche en Lekeito. Día 3: Castillo de Butrón - San Juan de Gaztelugatxe - San Sebastián. Noche en San Sebastián.
Día 4: San Sebastián y vuelta a Barcelona.
Día 1: Bilbao
Decidimos salir de madrugada para aprovechar bien el viaje. Tardamos unas 6 horas y media en llegar desde Barcelona a la capital de Vizcaya, Bilbao. ¡Aquí empezaba nuestra aventura!
Al ser festivo había un ambiente genial por las calles de Bilbao. Aparcamos el coche en el centro y pusimos rumbo al casco antiguo. Empezamos por la Plaza Nueva, visitamos el Puente del Arenal, el edificio del teatro Arriaga, la Iglesia de San Nicolás y recorrimos las 7 calles: Somera, Artecalle, Tendería, Belosticalle, Carnicería, Barrencalle y Barrencalle Barrena.
Después de recorrer sus calles, queríamos degustar sus famosos pintxos. Tenéis para elegir. Sus callejuelas están repletas de bares con variedades infinitas de este manjar. Todos sabemos que Euskadi es famoso, entre otras cosas, por su gastronomía. No nos íbamos a ir a dormir el primer día sin degustar los pintxos acompañados de una buena copita de vino blanco. Además, te recomendamos probar uno de sus platos estrella, el bacalao al pil pil.
Con la barriga llena, pusimos rumbo a nuestra última parada: el Museo Guggenheim. Siguiendo la ría llegarás sin problema. Nosotras solo lo visitamos por fuera, donde puedes encontrar las figuras de Jeff Koons: el gran perro de flores o la araña gigante, ¡son impresionantes! Si tienes tiempo y ganas, podéis entrar a disfrutar de sus obras. La entrada cuesta 16€, tener en cuenta que los lunes está cerrado.

Dijimos adiós a Bilbao y pusimos rumbo al Puente de Vizcaya, el famoso puente que une Guecho y Portugalete. Ese día teníamos reservado un alojamiento rural en un pequeño pueblo llamado Urduliz. El dueño se llama Jon y es súper amable. Tuvo un trato genial con nosotras desde el primer momento. Así que, si tenéis oportunidad os recomendamos alojaros allí: Casa rural Ortulane. Además, evitar alojarte en las grandes ciudades te ayuda a reducir gastos durante el viaje.
Por recomendación de Jon, esa noche fuimos a cenar a Plentzia. No nos imaginábamos el bonito pueblo que nos esperaba al llegar. No entraba dentro de nuestra ruta y ahora, se lo recomendamos a todos aquellos que pasan por allí.
Día 2: Bermeo - Guernika - Zumaya - Zarautz - Lekeito
Mientras desayunábamos, Jon nos preguntó que teníamos pensado hacer ese día e ilusionadas le explicamos nuestro plan: empezar en la playa de Muriola, ir al Castillo de Butrón, seguir la ruta visitando uno de los imprescindibles de Euskadi: San Juan de Gaztelugatxe, y acabar el día visitando Bermeo, Guernika y llegar Lekeito, que es donde habíamos reservado la segunda noche. ¡Y suerte que se lo contamos!
Nos comentó que con Juego de Tronos, las visitas a San Juan de Gaztelugatxe habían aumentado tanto que si no haces reserva por Internet en algunas épocas del año no puedes visitarlo. Como no había horas libres para ese día, tuvimos que reservar para el día siguiente y hacer un cambio de planes, ¡os contamos lo que hicimos!
Empezamos el día recorriendo las calles de Bermeo, un pueblo pesquero con mucho encanto. Fue uno de los pueblos que más nos gustó: su puerto con casitas de colores, el ambiente, perdernos por sus callejuelas. Aprovechamos para disfrutar del sol en una de sus terrazas, ¡qué buen día!

Nuestra siguiente parada fue el pueblo de Guernika, no nos podíamos ir sin visitarlo. ¿Quién no conoce la obra maestra de Picasso y el bombardeo que le inspiró a hacer la pintura? Hace unos años pudimos verlo en el museo Reina Sofía de Madrid y nos impresionó, ahora queríamos ver el mural al aire libre que se encuentra en Guernika, visitar sus calles y ver la iglesia de Santa María. Y para no perder la costumbre, también aprovechamos para seguir disfrutando de sus pintxos en los bares de la zona.

Zumaya nos esperaba. Creemos que en todo roadtrip por el País Vasco no puede faltar esta visita. Tras aparcar en uno de los parkings gratis que hay, fuimos a visitar el casco antiguo. Probablemente, el sitio más famoso es la Ermita de San Telmo, donde se grabó la boda de Ocho apellidos Vascos. En este pueblo también encontramos otros escenarios de la película, así como de la aclamada serie de Juego de Tronos. Paseamos por sus calles hasta llegar a la playa de Itzurun, una playa con acantilados de piedra caliza que no dejan indiferente a nadie.

Nuestra última visita fue el paraíso de los surfistas, Zarautz. Su playa de arena fina, es la más larga del País Vasco. Paseamos por el paseo marítimo y nos sentamos en uno de sus bares para disfrutar del atardecer, ¡teníamos unas vistas impresionantes! También podéis ir al oeste de la localidad donde se encuentra el casco viejo para hacer compras, relajarte y disfrutar de sus bares y restaurantes.

Ese día hacían la fiesta de la cerveza en Zarautz y tuvimos la suerte de encontrarnos con unos amigos de Barcelona. El alojamiento donde íbamos a pasar la noche se encontraba en Lekeito, a una hora de Zarautz. Debido a nuestro cambio de planes de buena mañana, pensamos que sería buena opción mantener el alojamiento para así estar cerca de San Juan de Gaztelugatxe, nuestra primera parada del día siguiente. Pero como ya habéis visto, las cosas no siempre salen como planeamos.
Disfrutamos de la noche en Zarautz y de su ambiente, hasta que decidimos poner rumbo a Lekeito. Teníamos una reserva en Albergue Trinkete Etxea con el cual nos habíamos puesto en contacto antes de ir para avisar de que llegaríamos más tarde de la hora prevista. Llegamos sobre las 23.30h, según nos habían comentado nos dejaban las llaves en el bar de abajo, pero estaba cerrado. No había forma de ponernos en contacto con el alojamiento. Nos pusimos en contacto con booking y nos ayudó a encontrar otro alojamiento, pero fue imposible. Era Sábado de semana santa y todos los alojamientos estaban completos. Estuvimos toda la noche buscando campings, albergues, hostales, hoteles y solo había habitaciones que rondaban los 500€ (no estábamos dispuestas a pagarlo). Así que, nos dimos por vencidas. Era tarde y estábamos cansadas. Buscamos un parking tranquilo y pasamos la noche en el coche. Fue uno de esos momentos que aún recordamos y que quedarán como anécdota toda la vida de nuestro viaje al País Vasco.
Día 3: Castillo de Butrón - San Juan de Gaztelugatxe - San Sebastián
Este día teníamos pensado dedicarlo a ver Zumaya, Getaria, Zarautz y llegar a San Sebastián, pero con el cambio de planes, empezamos el día visitando el Castillo de Butrón. Es realmente impresionante y parece sacado de un cuento, ¡vale mucho la pena ir a verlo!

Por fin pusimos rumbo a San Juan de Gaztelugatxe. Como os hemos contado al tratarse de uno de los escenarios de la serie de Juego de Tronos (Rocadragón) ha ganado mucha fama estos últimos años. Su aforo máximo es de 340 personas y para poder acceder hay que reservar en este enlace. La reserva, así como su entrada, son gratuitas y debes hacerla si tienes pensado visitar este lugar en semana santa, el puente de Marzo, fines de semana o festivos. En la web encontraréis más información. Cuando haces la reserva te llega un mail que tendrás que enseñar en el punto de acceso: digital o impreso.
Creemos que es otra visita imprescindible que no puede faltar en un roadtrip por el País Vasco. Eso sí, ármate de paciencia. Aparcar el coche fue todo un reto. Encuentras coches aparcados por todos lados, la gente se desespera, te pitan, pero consigues aparcar. Para llegar a la cima y visitar la ermita, tienes dos opciones:
El camino largo (Ermu): una carretera de unos 2,8km más fácil y con poco desnivel.
El camino corto (Urizarreta): un camino estrecho y con más desnivel.
Nosotras decidimos probar los dos, así que hicimos el camino largo para bajar y el camino corto para subir.

Una vez en el pie del peñón, empiezan los 241 escalones hasta llegar a la ermita. No podéis iros de allí sin tocar la campana tres veces mientras pedís un deseo.
Para acabar el día pusimos rumbo a San Sebastián. Paseamos por sus calles hasta llegar a nuestro alojamiento y hacer el checkin Off beat Guesthouse. Nos costó encontrar alojamientos económicos en la ciudad, así que nos decantamos por este que tenía baño compartido y habitación con cuatro literas. La habitación era muy estrecha, un poco claustrofobica para según que personas (Sandra es una de ellas). Solo entrar tuvo que salir corriendo al balcón para coger un poco de aire. Aun así os recomendamos este alojamiento, las habitaciones y el baño estaban muy limpios y la ubicación es genial. Una vez instaladas nos fuimos a cenar por el casco antiguo de la ciudad, concretamente, a la calle 31 de agosto.
Día 4: San Sebastián
Era nuestro último día en el País Vasco y estábamos en San Sebastián. Todo el mundo nos había hablado muy bien de esta ciudad, así que nos dedicamos a recorrer sus calles durante toda la mañana hasta poner rumbo de vuelta a Barcelona.
Empezamos el día visitando la Iglesia de los ricos y la Iglesia de los pobres. Pusimos rumbo a la plaza del mercado, la plaza Sarriegi y la plaza de la constitución. Todas estas paradas se encuentran cerca, se pueden hacer caminando.
Nos acercamos a la Playa de la Concha, pero sin poder bañarnos, nos quedamos con ganas de volver en verano y poder disfrutarla bien.

Por último, cogimos el coche y fuimos a la playa de Ondarreta. Allí se encuentra la obra del escultor vasco Eduardo Chillida, el Peine del Viento. Estuvimos un buen rato contemplando como la fuerza de las olas rompía con las rocas. Después pusimos rumbo de vuelta a casa.

Os dejamos a continuación la ruta que teníamos pensado realizar y la que recomendamos para aprovechar bien el tiempo:
Día 1: Llegada a Bilbao y visita del famoso puente de Vizcaya.
Día 2: Playa de Muriola - Castillo de Butrón - San Juan de Gaztelugatxe - Bermeo - Guernika - Lekeito.
Día 3: Zumaya - Getaria - Zarautz - San Sebastián.
Día 4: San Sebastián
También se puede hacer al revés, empezando por San Sebastián y acabando en Bilbao. Pero queremos deciros, que como habéis visto, no todo sale siempre como planeamos y ¡no pasa nada! Al final, la improvisación y los cambios de última hora hacen que un viaje sea especial y puedas llegar a vivir experiencias nuevas como dormir en un coche.
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